"Fuentes creía en la juventud como motor de cambio, en la lectura como diálogo y en el diálogo como pregunta", Nubia Macías, directora de la FIL de Guadalajara, para CNN México
México pierde a
Carlos Fuentes
“Perdemos a un gran escritor e intelectual, a una voz crítica indispensable para comprender nuestro presente, pasado y futuro, y también a un amigo muy cercano”,
Carlos Fuentes fue un escritor comprometido con su tiempo. Sus
aportes a la literatura y al pensamiento contemporáneo, a la identidad
latinoamericana, son indiscutibles. Fue un autor que nos mostró siempre
que la historia es la única fuerza posible para comprender, dentro y fuera
de la literatura, al mundo y, sobre todo, quiénes
somos.
La Feria Internacional del Libro de Guadalajara lamenta profundamente su muerte,
ocurrida hoy en la Ciudad de México a la edad de 83 años. “Perdemos a un
gran escritor e intelectual, a una voz crítica indispensable para
comprender nuestro presente, pasado y futuro, y también a un amigo muy
cercano. Su fuerza creativa y profunda fe en la cultura se vieron siempre
reflejadas en su participación en la Feria, y en la creación de
la Cátedra
Latinoamericana Julio Cortázar, que él
impulsó y dirigía en nuestra casa de estudios, junto con Gabriel García
Márquez”, dijo Raúl
Padilla, presidente de la Feria.
Para Carlos Fuentes, la FIL fue
siempre un espacio donde era posible acercarse a los jóvenes, que para él
simbolizaban el futuro de este país y de la lectura. Consciente de su
lugar como uno de los mayores escritores en nuestra lengua, impulsó
siempre a nuevos creadores, alimentó los programas literarios y apadrinó
la presencia de autores de todo el orbe en Guadalajara.
Figura indispensable en los salones y pasillos de la FIL,
Carlos
Fuentes fue un autor que privilegió la relación con sus lectores, que
suman miles. Era frecuente que hiciera largas firmas de autógrafos, en las
que hablaba con la gente, “para saber qué piensan”, decía. “La relación de
Fuentes con los lectores en la FIL era increíble y fue siempre
correspondido. Nunca olvidaremos aquella ocasión, cuando con motivo de sus
80 años organizamos una charla en la que mil jóvenes hablaban con él sobre
Aura. Cuando los chicos le
cantaron las mañanitas en el auditorio Juan Rulfo, Fuentes no pudo contener las lágrimas. Fue
siempre cálido y generoso con su público”, recordó Nubia Macías,
directora de la
FIL Guadalajara.
Carlos Fuentes fue una fuerza vital para las letras iberoamericanas. Su
lucidez, agudeza, su increíble sentido del humor y sus extraordinarias
dotes como orador, eran el sello de todas y cada una de sus apariciones
públicas. Su voz se ha apagado en un momento crucial para México, pero
resuena en las páginas de su obra, legado para sus lectores de todos los
tiempos.